Eternamente agradecido.

Ahora si te vas, tan solo un partido con la misma camiseta de hace años te queda, tan solo un partido de tu retiro oficial, anoche fue tu ultimo partido en la cancha mas hermosa de toda la Argentina, y de todo el mundo, no pudiste hacer eso que tanto deseaste, el gol, pero hiciste algo que poca gente logro, hacer emocionar a casi toda la Argentina. Me hiciste llorar como poca gente lo hizo, no aguante cuando Ciro termino de entonar el himno con su armónica, y vos besaste el tatuaje que tenes en el brazo izquierdo con lágrimas en los ojos. Después del domingo que se viene todo va a ser distinto, no te voy a ver mas en el “área” esperando como siempre lo hiciste para meter un gol, o solamente para hacernos gritar a mi y a muchos el tan odiado “uuuuuuu” cuando la pelota pasa por al lado del palo, no te voy a ver mas haciendo ese festejo con la hinchada y la amada canción “Y dale, y dale, y dale Boca dale”, eso si era algo hermoso. Pero mas haya de todo no puedo ser egoísta, estas grande y por ahí queres disfrutar tiempo con tu familia, queres hacer las cosas que en todo este tiempo no pudiste hacer solo por ser responsable con toda tu gente, con tu amada hinchada. Sinceramente no quiero pensar que llegue el domingo y te vayas para siempre, que nunca más te vea con la 9 saliendo del túnel para entrar a la cancha, pero todas las alegrías que me diste desde que soy chico, las voy a guardar en la memoria y en el corazón, y esa frase tan hermosa que dijiste ‎"lamentablemente siempre me quisieron por decir que era hincha de estudiantes, pero quédense tranquilos, que los voy a llevar adentro de mi corazón", vivirá en mi cabeza de por vida.

Creo que no tengo mas nada que decirte Titán, estoy eternamente agradecido por todo lo que diste al club mas hermoso del mundo que es Boca, gracias una y mil veces, te llevare siempre en mi corazón Xeneize.

Yo, uno más del montón.